Un
viento de esperanza
hoy satura a la Nación
el pueblo se sacude
del letargo destructor,
ya nadie lo detiene
en su anhelo de ascender
remozando el pasado
que al mundo entero asombré.
En las punas andinas
donde todo es colosal
el indio y las tormentas
no dejan de combatir.
Y en
las costas peruanas
de mar, viento y soledad
orfebres del incario
mezclan, Arte gloria y fe.
En las
cumbres nevadas
en tierras de la selva
y de
Piura a Tacna
se quiere trabajar
pues surgen hombres nuevos
con ansias de grandezas
con obras que pregonen
las glorias del Perú.
Austeros
Campesinos
no se cansen de sudar
pues nada come el hombre
si el labriego no sembró.
En costa, sierra y selva
hay anhelo por surgir
hacer la patria grande
con obra, alma y corazón.